VIRGO
Virgo es un signo de tierra, práctico y analítico que busca la perfección y la pureza en todas sus formas que lleva a sus nativos, o a quienes tienen este signo destacado, a ser controlados y críticos, con un fuerte sentido de autopreservación y necesidad de seguridad.
Virgo tiende siempre a la interiorización, a la humildad, a rechazar todo lo instintivo y pasional, buscando siempre el ritmo natural y la corrección, el ritual cotidiano.
El tiempo de Virgo es el de la cosecha, el de la preparación y administración para el invierno, tiempo de trabajo y organización. Los nacidos bajo el signo de Virgo suelen tener estas cualidades de organizadores y administradores, aunque pueden quedarse atrapados en su propio orden y método, en su tremenda practicidad podríamos decir que «los árboles no les dejan ver el bosque».
Despues del exceso y la certeza leonina se necesita cambiar las estructuras que nos habían servido hasta ahora y organizarnos para la nueva etapa, en el signo de Libra, en el cual vemos al otro como el espejo de un mismo. Virgo es el ritual de preparación, el orden necesario para entrar en el nuevo ciclo de experiencias.
La tierra de Virgo es una tierra preparada para el cultivo, es la tierra fértil que da fruto si se trabaja. Es la tierra cotidiana, no la pasional o volcánica que veíamos en Tauro, ni tampoco la montaña más alta que veremos en Capricornio.
Virgo es la tierra que aunque cambie es predecible y moldeable y que, si la tratamos bien, cubrirá nuestras necesidades.